El proyecto es una colaboración entre países en desarrollo para apoyar el establecimiento de una transición hacia economías sólidas “compatibles con el clima” y el nuevo modelo energético.
La utilización de fuentes de energía renovable es la alternativa más fuerte para apoyar el desarrollo sostenible en las islas y preservar su biodiversidad, reduciendo las emisiones de CO2 y los riesgos derivados de los combustibles fósiles.
Así lo reconoce la Directiva 2012/27/UE, relativa a la eficiencia energética, y obliga a los Estados miembros a que hasta el año 2020 minoren el nivel de emisiones de CO2. Con moratoria en las renovables, ello no se conseguirá.
España se ha comprometido con Europa en reducir los GEI haciéndo más eficientes los edificios. Veámos en esta consulta como la eficiencia energética es capaz de ello.
En Chile al menos 10 millones de personas están expuestas a la alta contaminación del aire. La integración de energías como la fotovoltaica solar y la eólica pueden ayudar a bajar las emisiones de CO2 en el país.
El cobre usado eficientemente reduce las emisiones de CO2, por ello, se está tratando de mejorar su eficiencia, ya que es un material que tiene multiplicidad de usos y respeta el medio ambiente.
Veámos con un sencillo ejemplo como una vivienda con una serie de características y con una serie de emisiones de CO2 consigue reducir las mismas, obteniendo mejor clasificación.
Sin un precio sobre el carbono, la sociedad, en efecto, asume que el carbono liberado a la atmósfera es gratis. Pero, por supuesto, las emisiones suponen enormes costos a la salud de las personas y causan daños al medio ambiente en nuestro planeta.
El documento prevé cumplir en el horizonte del 2020 los objetivos 20-20-20 establecidos por la UE: reducir la energía un 20,2%, aumentar al 20,1% las renovables y reducir un 25,3% las emisiones de CO2