Calefacción y frío solar

Ventajas, ahorros y casos prácticos

En esta página:

Mediante colectores, se aprovecha el calor del sol para utilizarse directamente en el circuito de calefacción o para servir de apoyo y disminuir el consumo de la caldera, precalentando el agua que usa.

Funcionamiento

Las instalaciones de calefacción solar incorporan un acumulador de agua caliente con doble serpentín para intercambio de calor. Por un serpentín fluye el líquido caliente de los captadores y por el otro el agua caliente de la caldera.

En caso de ser suficiente la energía térmica de los colectores, la caldera (de gas, electricidad, gas-oil) deja de funcionar; en otro caso cubre la necesidad activándose.

Implementacion

Con instalación preexistente de radiadores:

Dado que trabajan a temperaturas 70/90 ºC, se aconseja utilizar colectores de tubos de vacío.

De nueva construcción:

La Fase de planificación de nueva edificación es el momento más adecuado para beneficiarse de la modalidad más interesante de las existentes en sistemas de calefacción: El Suelo Radiante.

Suelo Radiante

Se trata de la más eficiente y económica manera de calentar un hogar, por su limpieza y confortabilidad.
Mediante el apoyo con bombas de calor, permite mantener el suelo caliente en invierno y refrigerarlo mediante agua fría en verano.

Son características del sistema:

Saludable, pues no supone polvo, evita ácaros. La velocidad de circulación del aire no supera los 0,05 m/s y evita ennegrecimiento de paredes y cortinajes.
Silencioso. El aislamiento termoacústico incorporado al suelo evita ruidos y redunda en una mayor calidad constructiva.
Confortable, proporcionando completa sensación de bienestar al integrarse en el proceso natural de la temperatura, que se propaga hacia arriba. Evita el insano frío en los pies y mantiene la cabeza fresca.
Económico, pues es el que menor consumo de energía supone. Además, con 2 grados menos, tendremos la misma sensación térmica comparada con otros sistemas.
El suelo radiante está formado por una red uniforme de tuberías de etileno reticulado, enterrada bajo el pavimento, por la que fluye líquido a temperatura de 35 a 45ºC. Otros sistemas de calefacción, como el gas, precisan el calentamiento del agua hasta los 80º C.

Suelo Radiante — Sección de solado con tubería radiante

Zócalo radiante

Otra variante de instalación más simple es el que se instala en el rodapié de la parte inferior de las paredes y muros.

Tapa Frontal.
Altura total (19 cms.).
Soporte estructural.
Patín antirruido por dilatación.
Elemento radiante.
Placa difusora/convectora.
Conexión en cobre.
Dumper de modulación total.
Soporte para caño de retorno.
Entrada de aire inferior.
Terminación en pintura horneada.

Frío solar

El aire acondicionado y refrigeración solar se llevan a cabo por compresión térmica, proceso que consume básicamente agua caliente que, según su funcionamiento pueden ser de :

Ciclo abierto:

Deshumidifican el aire y le proporcionan la temperatura adecuada.

La deshumidificación se logra mediante un rotor con material desecante como gel de silicio o con desecantes líquidos (cloruro de litio).
La regeneración de la unidad de absorción/adsorción es conseguida mediante el calor solar.

Ciclo cerrado:

Utilizan desecante evaporativo en dos variantes del proceso:

Adsorción: precisa desecantes sólidos, como gel de silicio o zeolito. Utiliza agua como refrigerante.
La temperatura de la fuente caliente puede ser inferior a la de las máquinas de absorción (a partir de 55 ºC). Esto permite el uso de captadores planos.
Absorción: precisa desecantes líquidos, como bromuro de litio. Utiliza agua como refrigerante. También agua como desecante y amoniaco como refrigerante, en cuyo caso se pueden alcanzar temperaturas incluso bajo cero; si bien tiene el gran inconveniente de la toxicidad del componente.
Pueden funcionar con agua caliente a partir de 80 ºC.