La Certificación Energética y la integración de energía renovable en edificios.
La integración de energías renovables, como la solar fotovoltaica en la edificación, hará que se obtenga una mayor calificación de eficiencia energética y avanzar hacia construcciones más sostenibles.
Según el Real Decreto de Certificación energética de Edificios, la calificación de la eficiencia energética de un edificio o unidad de este, es la expresión que considera el consumo de energía necesario para satisfacer la demanda energética del edificio en unas condiciones normales de funcionamiento y ocupación. Se determinará de acuerdo con la metodología de cálculo que figura en el anexo I de dicha ley.
De manera simplificada, la certificación energética del edificio tiene en cuenta el comportamiento térmico del edificio, atendiendo a: zona climática, tipología de usos, el horario de actividad del edificio, la envolvente térmica y los sistemas consumidores de energía.
Los sistemas consumidores de energía que entran dentro de la calificación energética son: los sistemas de agua caliente sanitaria, la iluminación los sistemas de climatización. El sistema de calefacción y energías renovables de las que el edificio pueda hacer uso.
Las oportunidades de mejora para la calificación energética de edificios vendrá dada por las mejoras que puedan darse en estos sistemas, es decir, si un edificio por ejemplo, mejora sus sistemas de iluminación, pasando de la iluminación incandescente convencional a la iluminación fluorescente ECO, ese mismo edificio habrá mejorado algunos puntos para la calificación energética total.
En el caso del ahorro energético del edifico, la eficiencia energética existen tres componentes claves:
Reducir la demanda de calefacción y refrigeración: Esto se consigue a través de: las envolventes del edificio (aislamiento, huecos etc..), y por otro lado el diseño del mismo, es decir, cómo influye la distribución, la orientación, ya que por ejemplo la orientación al norte o al sur y según la época del año, puede influir en la demanda energética de energía.
Otro factor que influye sobre el consumo energético del edificio son las instalaciones. Es conveniente que el edificio cuente con diseño de instalaciones de bajo consumo, en iluminación por ejemplo o que los equipos para transporte de fluidos, como ventiladores y bombas sean sustituidos o diseñados por otros equipos que cuentes con motores de alta eficacia y variador de velocidad.
El tercer factor clave y que más puede favorecer la calificación energética en edificios es la posible implantación de energías renovables en la parcela.
Es aquí donde el autoconsumo fotovoltaico tiene un protagonismo en la eficiencia energética de edificios.
Las nuevas construcciones avanzan a ser autosuficientes energéticamente y tener una carga más baja de emisiones de CO2.
En el caso de la Comunidad de Madrid, se están dando los primeros proyectos de edificios de nueva construcción que pueden obtener la certificación energética tipo A, gracias a la instalación de fuentes de energías renovables en su diseño, tales como la energía solar fotovoltaica, la geotermia.
Uno de los ejemplo es el proyecto de Arroyo de Bodonal en Tres Cantos, donde se construirán 80 viviendas sostenibles, en las cuales se espera conseguir un ahorro energético del 70 %. gracias al abastecimiento de energía para la edificación proveniente de fuentes renovables como la geotermia y fotovoltaica.
El Real Decreto aprobado sobre la certificación energética de edificios ha abierto una puerta hacia la revolución energética en la construcción, no solo en nuevas edificaciones si no en aquellas que fueron construidas sin ningún criterio de eficiencia energética y en la que será importante los proyectos de rehabilitación, para que el certificado energético obtenido pueda ser competente en un mercado inmobiliario cada vez va a ser más exigente con estos valores.
En este marco la energía solar fotovoltaica y la térmica tienen gran aplicación dentro de las ciudades. El código técnico de la edificación exige que un tanto por ciento del agua caliente sanitaria pueda obtenerse por energía solar térmica, así como aprovechar siempre que sea posible la implantación de energía fotovoltaica en España, donde hay muy buenos niveles de irradiación.
La integración de energías renovables en la construcción y rehabilitación, es una realidad para mejorar la calificación energética de los edificios y avanzar hacia una construcción más sostenible.
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