Estos proyectos se enmaran en la Política Energética Uruguay 2030, cuyo eje de la oferta pone especial énfasis en la diversificación de la matriz energética.
El gobierno de Uruguay está llevando a cabo un esfuerzo en crear un marco regulatorio estable y los incentivos suficientes para atraer a los inversores privados. Las ventajas de aumentar la generación con energías renovables también se notará en el bolsillo de los ciudadanos. Uruguay podrá rebajar las tarifas de electricidad y su sistema será mucho más competitivo si logran sus metas y objetivos en energías renovables integradas en la matriz.
La transformación energética del país está enmarcada en la política energética aprobada por todos los partidos con representación parlamentaria en 2010, y se ha desarrollado a buen ritmo. Según fuentes estatales en cinco años se han logrado 7.000 millones de dólares en inversión, y añadió que cada año el 3% del Producto Bruto Interno (PBI) del país se reinvierte en la transformación energética.
En este contexto, durante este mes de agosto se realizó la firma de contratos de compra venta de energía con UTE, referentes a las plantas solares fotovoltaicas Casalko (1,7 MW) y Raditon(8 MW). El evento que se desarrolló en el Palacio de la Luz contó con la presencia del ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman; el director nacional de Energía, Ramón Méndez; el presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla; el gerente general del ente, Carlos Pombo; y el intendente de Paysandú, Bertil Bentos.
La planta de Casalko está ubicada en la localidad de Constancia, mientras Raditon se construirá próximamente en el Parque Industrial de Paysandú.
Adicionalmente, Tecno Group y SKYSolar Group presentaron el proyecto para la instalación de una fábrica de paneles solares fotovoltaicos, que comercializará sus productos en el mercado local y el exterior.
El emprendimiento demandará una inversión de US$ 2,3 millones (US$ 1 millón en maquinaria y equipos y US$ 1,3 millones en infraestructura). La obra llevará tres meses de construcción y la puesta a punto otros seis meses, ya en etapa de producción. Tendrá una producción anual de equipamiento capaz de generar el equivalente a 50 megavatios (MW).
La fabricación local facilitará el suministro en el mercado nacional, además de generar puestos de trabajo parael departamento de Paysandú. El complejo industrial dará empleo a unas 100 personas. Hong Chen, líder de la empresa china fundada en 2001, consideró que en nuestro país "existe un potencial muy grande para esta generación" y agregó que desean aprovecharlo también para el proceso de industrialización del sector, por lo que pretenden "llevar adelante este proyecto para que, en un futuro no muy largo, las plantas de micro y macrogeneración sean un producto made in Uruguay".
Por otra parte, UTE tiene previsto próximamente la firma de nuevos contratos con generadores fotovoltaicos en Artigas, Salto, Rivera y Tacuarembó, de acuerdo a las adjudicaciones realizadas el año pasado. El total de emprendimientos en desarrollo tendrá una inversión cercana a US$ 300 millones.
Se logra una generación eléctrica exclusivamente a partir de fuentes renovables, cubriendo la demanda interna de 1,437 MW y generando un excedente exportable de 226.47 MW para suplir el déficit de otros países en la región.
El texto reconoce resultado del Grupo de Trabajo sobre Transiciones Energéticas del G20 a partir de la carta que el ministro Alexandre Silveira entregó al Papa Francisco a principios de este año