Deflación fotovoltaica= caída de precios de venta de la energía + descenso en el precio de los componentes + parálisis del sector + disminución de la demanda de material fotovoltaico en espera de seguir bajando. OJO con la ejecución de los avales...
Según el FMI (Fondo Monetario Internacional), la deflación es una caída de los precios en el conjunto de la economía que se prolonga durante varios períodos (al menos dos trimestres). Por lo tanto, se excluyen las caídas de precios en sectores concretos o que se produzcan de forma puntual. La deflación es el fenómeno económico opuesto a la inflación.
Aunque por definición el término no puede aplicarse a un sector, en este caso, el fotovoltaico, no cabe duda de que la suma de los factores configura el producto, y a nivel microeconómico se viene produciendo en este ámbito, lo que sería una Deflación de libro a nivel de conjunto de la economía:
- La caída de precios de venta de la energía lleva produciéndose ininterrumpidamente desde la aprobación del RD 1578/08. La variación media sufrida es apróximadamente del 30 %.
- El descenso en el precio de los componentes, es igualmente ininterrumpido, pues hace un año el precio del wp estaba en 3, 50 €/Wp y actualmente resulta posible adquirirlo por 1, 50 €/Wp , materializando un descenso del 57,23%.
- La parálisis del sector también coincide con el síntoma/efecto de la situación actual:
Por definición en Wikipedia, "Con los precios bajando de forma generalizada, la demanda disminuye más, porque los consumidores entienden que no merece la pena comprar si mañana todo será todavía más barato".
En esta peligrosa situación el pánico se precipita por la falta de soluciones, que, parafraseando la fórmula Anti-Deflación debieran llegar en varios sentidos:
- Políticas monetarias: Bajando los tipos de interés para animar el consumo/inversión.
- Políticas fiscales: Mediante incentivos que favorezcan la implantación masiva de las fuentes renovables en la vida e impuestos de todos los ciudadanos.
- Sentido común: Evitación de trámites burocráticos administrativos que dificultan y entorpecen las iniciativas.
No obstante, es más que probable la ausencia de iniciativa propia y la falta de decisión para tomar las medidas necesarias, de forma que la salida del bache dependa de terceros factores:
- Subida del precio del petroleo, cuya tendencia al alza ya ha comenzado. Ello hace más atractivo el uso de energías renovables por la disminución que representa respecto de la grid-parity.
- Demanda de otros países emergentes, actores del mercado.
- Desastres naturales provocados por energías sucias y de riesgo.
No deja de sorprender a los expertos de fotovoltaica el parón fotovoltaico en el que España se encuentra, tras la demostración de la valía experimentada por el promotor con anterioridad a la promulgación del Real Decreto 1578/2008.
