Europa estudia establecer aranceles a los módulos fotovoltaicos de fabricación china.

Bruselas dio luz verde a la investigación para dictar medidas provisionales como la imposición de los aranceles a la importación de los paneles provenientes de china, a partir de la tensión instalada entre los fabricantes europeos y sus competidores chinos.

Parece ser que considera que existen pruebas suficientes de que el país asiático, vende estos productos por debajo del coste de producción (práctica conocida como dumping) gracias a las subvenciones de su Gobierno, casi al límite de las reglas de competencia de los mercados internacionales, causando un grave perjuicio a los fabricantes europeos de paneles solares.

Los EEUU ya han impuesto una tasa similar el pasado año, aduciendo que la rápida expansión china en la industria había generado un exceso de oferta.

Los fabricantes europeos no cuentan con ese apoyo por parte de los gobiernos, por ello varias empresas asociadas, bajo la iniciativa de EU ProSun, cuyo presidente es Milan Nietzsche, han liderado la protesta comercial de la industria solar europea.

Este fue uno de los orígenes que dio lugar a la investigación, sobre fabricantes chinos que la Comisión Europea inició el pasado año y por la cual deberá llevar a cabo una resolución antes de junio sobre los aranceles a las importaciones de paneles solares chinos.

Milan Nietzsche, en una de sus declaraciones recientes a la prensa a la afirmaba que “El dumping es el peor problema al que se enfrenta el mercado solar europeo”. ““El incumplimiento diario del derecho mercantil por parte de China destruye miles de puestos de trabajo en la industria europea. Si a China se le permitiera crear un monopolio en el ámbito solar de este modo, esto no solo tendría consecuencias catastróficas para la industria solar europea, sino también para los proveedores, fabricantes de materiales y miles de empresas de instalación. Los monopolios no suponen una reducción sino un aumento de los precios.”

Pero estas decisiones están sembrando la polémica en el mercado de la energía solar y está dando lugar posiciones encontradas. Los aranceles harían subir de nuevo el coste de la instalación de paneles solares.

Mientras que EU ProSum está a favor de los aranceles al producto solar chino, otra asociación formada por la coalición de más de 450 empresas de la industria europea fotovoltaica, AFASE (Alianza para la Energía Solar Asequible) se declara totalmente en contra de la imposición de los aranceles, y muestran su oposición a la decisión de la Comisión Europea de proponer aranceles provisionales de entre el 37 y el 68 % a la importación de los paneles solares chinos.

Los argumentos que presenta AFASE, es que los aranceles punitivos, no importa a qué nivel, podrían causarían un daño irreversible a la cadena de valor fotovoltaica (PV) europea al completo. Los niveles planteados tendrían un elevado coste para la industria fotovoltaica europea y para toda la economía de la UE.

AFASE se apoya además, en un estudio realizado por el instituto independiente de investigación Prognos. Este concluye que unos aranceles del 60% tendrían un coste para la economía europea de hasta 242 000 puestos de trabajo y de 27 000 millones de euros en los próximos tres años.

Durante una sesión organizada por la Comisión Europea el viernes 5 de abril, los miembros de AFASE dejaron claro que en el desarrollo actual del mercado no hay sitio para la subida de precios y que unos aranceles del 15% como mínimo destruirán el 85% de la demanda fotovoltaica de la UE.

El negocio solar es muy sensible al precio, por lo que añadido al descenso de las tarifas y el corte de las subvenciones en Europa, si se incrementa el precio debido a los aranceles el mercado solar europeo podría estancarse y paralizar trabajos y empleos.

Por ello las compañías que apoyan a AFASE, piden a la Comisión Europea, que tome en cuenta en sus decisiones los intereses de ambos extremos de la cadena de la industria solar europea y esperan que la solución negociada, no pase por imponer los aranceles provisionales, ya que esto supondría un parón inmediato en la mayoría de los proyectos fotovoltaicos en la UE y causarán un enorme daño que no podrá reparar ninguna negociación resuelta después de la imposición de medidas provisionales.

Por otro lado, Guangbin Sun, Secretario General de la división solar de la Cámara de Comercio de China afirmó: "Si se obstaculizan las exportaciones de China, las consecuencias caerán sobre los costos de los productos europeos. Sin embargo, estamos dispuestos a colaborar y mantener un diálogo con el fin de llevar nuestra producción de acuerdo con la demanda del mercado".

El portavoz del Ministerio de Comercio de China, Yao Jian, manifestó que “China no quiere una guerra comercial con Europa, pero protegerá los intereses de las empresas nacionales con respecto a la decisión de la Comisión Europea de imponer aranceles antidumping provisionales a las importaciones de paneles solares”.

Según fuentes de la Comisión, la decisión entrará en vigor previsiblemente a partir del 5 de junio, tras ser debatida por expertos de los Veintisiete el próximo 15 de mayo, aunque esta última opinión no será vinculante.

Se espera que la Comisión Europea anuncie el 6 de junio la decisión final sobre si aplica impuestos antidumping provisionales a los productos solares chinos. Los impuestos definitivos se decidirían en diciembre de este año.

Parece ser que España, la cual ya ha afixiado a la industria solar nacional, tiene poco que decir al respecto y aún no se ha pronunciado.