Laboratorios como el de Yingli avanzan en soluciones para prevenir la masiva acumulación de paneles en vertederos, que siguiendo la actual tendencia se prevé alcance los 80 millones de Tm. para 2050, movilizando su reciclaje 12.700 millones de Euros
Según estudio de NREL del Laboratorio Nacional de Energías Renovables publicado el pasado mes de julio, los expertos prevén que ya al final de la presente década unos 8 millones de toneladas de paneles solares acabarán en los vertederos.
Para realizar un somero cálculo podemos tomar tan sólo el incremento anual de potencia instalada durante 2019, que ascendió a casi 115 GW:
Suponiendo una potencia media de 300 Wp para los nuevos paneles instalados, habríanse aplicado 383 millones de paneles que, teniendo en cuenta un peso medio de 22 kg. colegiremos un peso total de 8.433 Toneladas para estos módulos que tras 30 años finalizarán su vida útil prevista.
Y es que el total instalado en 2019 ya ascendía a 629 GW, con tendencia de incremento sostenido en cuanto a nueva potencia instalada año tras año, así como una sensible reducción en el tiempo para la reposición de los módulos cuyo precio desciende de forma contínua a la vez que aumenta su potencia y eficiencia.
El tema no es baladí, por cuanto el volumen representaría alrededor del 10% de todos los desechos electrónicos. Si bien en su mayor parte formados por vidrio y silicio, también restarán algunos componentes residuales nocivos, como el cadmio, el plomo y el antimonio; además de otros como la plata y cobre.
Sin embargo, de forma paralela el mismo trabajo estima viable que de entre todos estos módulos desechados, resulte posible generar para 2050 una segunda vida para 2 mil millones de nuevas placas fotovoltaicas.
Abunda literatura desaconsejando en principio la adquisición de paneles "de ocasión" aduciendo diversas consideraciones, sobre las que tenemos a bien aportar perspectiva que deseamos constructiva:
- Procedencia de los módulos: Muchos de los módulos fotovoltaicos de segunda mano en oferta proceden de grandes instalaciones que los sustituyen por su falta de rendimiento, bien por estar dañados o por ser de mala calidad. Sin embargo, también podría responder su sustitución a la repotenciación de instalaciones.
- Garantía de los productos:
Sobre los módulos solares existen dos tipos de garantías, sobre el rendimiento y sobre el producto. En general la garantía sobre el rendimiento avala al menos el 90% durante los 10 primeros años, y un 80% hasta los 25 años. En cuanto a la garantía de producto, en general se limita a los 10 ó 12 primeros años.
El debate late sobre la diferencia de años entre la garantía de producción y la de materiales, con opinadores que la achacan a la falta de confianza del propio fabricante respecto de sus propios productos.
Otros puntos de vista estiman razonables los distintos plazos de cobertura, tildando como exceso de ostentación por parte de algunas marcas ofertar garantías iguales, de hasta 25 años también para los productos. En opinión de este colectivo subir la apuesta responde únicamente a una maniobra comercial para compañías de segunda línea y duración fugaz que muy probablemente habrán desaparecido antes de vencer las garantías que ofrecen.
Por otra parte, también algunos autores consideran la reparación de los módulos como rotúndamente antieconómica.
Ciértamente los precios de los paneles nuevos se han reducido drásticamente y el coste de manipulación de los mismos para detección de fallas y, en su caso, reparación de las mismas, tanto en taller donde se hayan de trasladar como en la propia instalación, pueden llegar a suponer desventajas.
La calidad profesional se revela actor principal en la valuación de los medios de producción. Conocimientos, pericia y empleo de medios eficientes para diagnóstico pueden clarificar la decisión, desestimando la reparación por antieconómica o detallando sobre la viabilidad para dotar de nueva vida al producto.
Problemas graves pueden consistir en:
Como indica el laboratorio Laboratorio del Centro de Servicio Posventa de Yingli, también los módulos fotovoltaicos pueden sufrir pequeñas averías durante su funcionamiento en la planta fotovoltaica, principalmente:
Estos componentes pueden ser reparados y los módulos vuelven a funcionar normalmente.
En cualquiera de los casos, tanto el despiece eficiente como su reparación, se incardinarán exitosamente los materiales en la dinámica de una economía circular con valores éticos que aportan un valor añadido también inmaterial que imprime valor de marca a todos los elementos de la cadena: proveedores, profesionales y usuari@s.
Además de la elección de productos de calidad, un correcto diseño del sistema de producción y su adecuado mantenimiento siempre ofrecerán el mejor aprovechamiento y darán solución puntual a cualquier desajuste que por factores externos pueda producirse. Por ello, empresas líderes como Yingli, proporcionan servicios integrales de O&M (Operación y mantenimiento) con el soporte de su Laboratorio especializado de primer nivel, creando conocimiento y promoviendo estándares de calidad superiores.
Un defecto grave que podemos encontrar en módulos fotovoltaicos debido a una deficiente calidad de los materiales y/o manipulación es el denominado punto caliente.
La plataforma firma un acuerdo con la asociación europea PV CYCLE, que representa al 90% del mercado europeo del reciclaje de este tipo de paneles solares.