La Agencia Internacional de Energías Renovables ha lanzado un comunicado en el que destaca que alcanzar el 36% de energías renovables en el mix energético global es posible y mitigaría el cambio climático.
El mundo se enfrenta a una elección importante de energía, así lo han expuesto los representantes de Agencia Internacional de Energías Renovables en una presentación en Nueva York hoy.
IRENA ha destacado en varias asambleas celebradas recientemente sobre el papel que están jugando las energías renovables en la transformación y el cambio a un nuevo modelo energético, donde los países sean más independientes a la hora de generar la energía, y la contribución de las nuevas tecnologías al medio ambiente, ya que se reducen las emisiones contaminantes a la atmósfera y se reduce la huella ecológica, pues las energías renovables se generan más próximas a los lugares de consumo.
El reciente estudio elaborado por la agencia, -Remapear 2030- es una hoja de ruta con la meta de duplicar la cuota de las energías renovables en el mix energético global. En dicho estudio se expone que el aumento de las energías renovables hasta el 36% en la matriz energética mundial para el año 2030 es posible. Además es necesario para mantener los niveles de emisión de contaminantes a escala mundial con un CO 2 nivel de 450 ppm. Este umbral es el aceptado para limitar el aumento de la temperatura mundial a dos grados centígrados por encima de los niveles preindustriales para el 2100.
Este informe demuestra que el costo de inversión para la expansión mundial de las energías renovables se ve compensado por un ahorro de hasta a $ 740 mil millones por año en costos asociados con la contaminación de los combustibles fósiles.
Adnan Z. Amin, Director General de IRENA, en Nueva York, planteaba ante la audiencia la pregunta de en qué fuentes de energía se quiere invertir y es rentable para evitar el cambio climático. La respuesta se encuentra en parte en el estudio Remapear 2030, donde se muestra que la transición es asequible basandose en las tecnologías existentes, y que los beneficios van mucho más allá del impacto climático positivo. Los países se enfrentan hoy en día una opción clara para un futuro energético sostenible.
Pero aunque esta meta es alcanzable, no se están siguiendo las pautas adecuadas. Para hacer esto realidad, los gobiernos deben intensificar sus esfuerzos y hacer políticas energéticas que permitan la integración de las energías renovables en sus matrices energéticas.
Según la exposición de Dolf Gielen, director del Centro de Innovación y Tecnología de la IRENA, la agencia recomienda centrarse en cinco áreas clave: la planificación de las vías de transición a las renovables deben ser realistas pero ambiciosas, la creación de entornos favorables de negocio, la gestión del conocimiento de las opciones tecnológicas y su despliegue, garantizar la integración armoniosa de las energías renovables en la infraestructura existente e invertir en la innovación.
Remapear 2030, se basa en el análisis de las necesidades de energía en 26 países que representan el 75% del consumo total de energía final global. IRENA ha colaborado con los países e instituciones de investigación en el desarrollo del informe, que se deriva de su objetivo de la Energía
Los objetivos del PNIEC son «relevantes» y «alcanzables», aunque esa «oportunidad única» que tiene la península y las urgencias climáticas por impactos que van a incrementarse obliga a «más ambición».
Son objeto de ayuda los proyectos asociados al ecodiseño, la reutilización y segunda vida, y el reciclaje de paneles fotovoltaicos, baterías y aerogeneradores, entre otros.