El potencial de Sudáfrica para la energía solar fotovoltaica.

Sudáfrica debido a su industria extractiva y el crecimiento de la población ha incrementado su necesidad energética, el aprovechamiento de la energía solar fotovoltaica se presenta como una de las alternativas más viables para cubrir esta demanda.

El país surafricano cuenta con gran abundancia de recursos naturales y una gran industria extractiva, de carbón, hierro, oro y diamantes. Esta industria junto con la necesidad de llevar electricidad a los hogares ha incrementado la demanda de energía de tal forma que las previsiones estima que para los próximos 20 años, Sudáfrica necesitará más de 52 GW de potencia nueva instalada. En la actualidad, la escasez del suministro eléctrico se deja notar, ya que la incapacidad del sistema está provocando apagones e incluso racionamientos de energía. El año 2008 fue un año complicado para el país respecto a la escasez de suministro eléctrico, el cual frenó el desarrollo industrial, sobre todo en la minería y bajó el empleo.

Sudáfrica además cuenta con una generación de energía bastante contaminante. Gran parte de esta generación, aproximadamente un 75% se genera a partir del carbón, ya que este es uno de los recursos más abundantes del país, pero el uso de este combustible genera gran cantidad de gases invernadero. Esto sitúa al país entre los más contaminantes de África.

En un marco mundial en el cual los países cada vez están más concienciados en bajar sus emisiones contaminantes a la atmosfera y en el cambio de sus modelos energéticos de los combustibles fósiles a energías limpias, Sudáfrica comienza a plantearse explotar otro de sus grandes recursos naturales, como es la radiación solar.

Por ello Sudáfrica se ha establecido unos objetivos del 30% de generación de energía renovable para el año 2030, lo que supone más de 18.000 MW, para diversificar su matriz y reducir esta dependencia del carbón. La integración de las energías renovables traerá numerosas ventajas para el desarrollo del país, como es el evitar los cortes del suministro ante la creciente demanda, reducir sus emisiones de gases invernadero y sobre todo, permitir la entrada de inversores privados en el sector energético, el cual se encuentra ahora básicamente en un monopolio de Eskom.

Eskom es la empresa estatal de energía que desde 1923 ha controlado el sector suministrando el 95% de la energía del país, sin embargo, las dificultades energéticas a las que se enfrenta el suministro eléctrico sudafricano ha llevado a impulsar la entrada de la inversión privada para que esta tome un papel importante en el futuro suministro de energía para cubrir las necesidades del país y aliviar la carga financiera del gobierno, considerando que es preciso que el 30% de la energía sea suministrado por nuevos productores independientes.

Sudáfrica pone en funcionamiento el programa de adquisición de energía renovable Independent Power Producer (IPP) para asegurar el suministro ininterrumpido de energía eléctrica. El programa surge sobretodo con el fin de alcanzar metas como de incrementar por lo menos aproximadamente 3725 MW de energía renovable para el objetivo 2030, para incentivar el desarrollo económico y ambiental, disminuyendo la pobreza, ya que se dan más oportunidades para la educación y se crean nuevos puestos de empleo, además de estimular la industria de renovables en el país y abrir las puertas a la inversión privada.

En este cuadro, de la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en Johannesburgo, se presenta el resumen de los primeros 47 proyectos seleccionados.

Las licitaciones del Departamento de energía de Sudáfrica, se dividen en 5 rondas y los participantes deben ofertar un PPA durante 20 años con la compañía eléctrica Eskom y no superar el límite establecido por el programa IPP. Otras de las condiciones que se les pide a los participantes es que los proyectos de fotovoltaica tengan 75 MW de de capacidad máxima instalada y que cuenten al menos con un 40% de participación de empresas locales, aunque este condicionante se ha ampliado a un 45% para la ronda 3. Actualmente se encuentran abiertas la ronda 4 y 5.

Los nuevos incentivos, el crecimiento de la demanda energética y el abundante recurso solar, han situado a Sudáfrica en el punto de mira de la inversión, por el gran potencial que presenta para el desarrollo futuro de grandes proyectos de fotovoltaica. Por ello ya muchas empresas de ámbito internacional, entre ellas españolas, están optando a la construcción de sus plantas fotovoltaicas en esta región.