Avanza el autoconsumo fotovoltaico en Catalunya.

Informe sobre la evolución y situación a septiembre de 2020: en Catalunya existían 6.377 instalaciones de autoconsumo fotovoltaico en servicio, con una potencia total instalada de 68,57 MW.

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Desde el año 2017 hasta la actualidad, el sector del autoconsumo fotovoltaico en Cataluña ha crecido de manera muy significativa, especialmente a partir del año 2019, a consecuencia de la aprobación de un marco normativo más favorable a esta tecnología que el que había anteriormente.

La siguiente figura muestra las instalaciones y la potencia instalada de cada año.

Cada trimestre se ponen en marcha más instalaciones que en el trimestre anterior. Este hecho es muy significativo a partir del primer trimestre de 2019, con un incremento trimestral medio del 54% hasta el tercer trimestre de 2020. En este tercer trimestre del año 2020 se han registrado 1.599 nuevas instalaciones de autoconsumo fotovoltaico con una potencia total de 12,18 MW.

   

La tendencia observada indica que cada vez se ponen en marcha instalaciones de autoconsumo fotovoltaico más pequeñas, es decir, con un mayor peso del autoconsumo doméstico. El siguiente gráfico, que presenta la potencia mediana instalada para cada trimestre, muestra esta tendencia.

Los 10 municipios con mayor número de instalaciones de autoconsumo fotovoltaico y los municipios con mayor potencia instalada registrada hasta este segundo trimestre del 2020 son los siguientes:

Los diagramas siguientes representan la distribución del número de instalaciones y de la potencia instalada de autoconsumo fotovoltaico en Cataluña a septiembre del 2020 por diferentes intervalos de potencia. En este sentido, el 74,5% de las instalaciones de autoconsumo fotovoltaico en Cataluña tienen una potencia igual o inferior a 5 kW, mientras que solo el 6,5% corresponde a grandes instalaciones de autoconsumo, por encima de 25 kW, hecho que demuestra que la mayoría de las instalaciones corresponden al ámbito doméstico. En cambio, en términos de potencia instalada, el 59,8% de la potencia instalada corresponde a instalaciones de más de 25 kW, más asociadas al sector industrial o al sector servicios.


Análisis de variables socioeconómicas

El gráfico siguiente representa, para los 20 municipios con más instalaciones, el número de instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo en relación con el número de habitantes del municipio. Este análisis permite eliminar, en parte, el efecto de las grandes ciudades.

El siguiente gráfico representa la presencia de instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo (número de instalaciones de autoconsumo fotovoltaico por cada 1.000 habitantes) respecto al peso de las viviendas unifamiliares sobre el total de viviendas en el municipio. Efectivamente, se observa una clara correlación entre estas dos variables, es decir, cuanto mayor es el peso de las viviendas unifamiliares en el municipio, más instalaciones por cada 1.000 habitantes hay.

Para acabar, se analiza la relación entre la renta familiar disponible bruta por habitante y el número de instalaciones de autoconsumo fotovoltaico por cada 1.000 habitantes. En este sentido, también se puede afirmar que existe cierta correlación entre la renta y el número de instalaciones de autoconsumo fotovoltaico, de forma que, cuanto más alto es el nivel de renta, más presencia de instalaciones por cada 1.000 habitantes hay.

Contrastando únicamente la variable del peso de las viviendas unifamiliares sobre el total del municipio y el número de instalaciones fotovoltaicas por cada 1.000 habitantes, se observa una clara correlación (R2 = 0,63); mientras que si se correlaciona el número de instalaciones con la renta familiar por habitante, se obtiene una R2 de 0,16. Por otro lado, si se analiza la correlación de las instalaciones fotovoltaicas con estas dos variables conjuntamente (porcentaje de viviendas unifamiliares y nivel de renta), la correlación es todavía más clara (R2 = 0,70).

Este análisis demuestra que existe una clara correlación entre el número de instalaciones fotovoltaicas y el peso de los de viviendas unifamiliares sobre el total del municipio, la cual mejora cuando añadimos la variable de la renta familiar bruta disponible por habitante.

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