La reforma energética en México basa la competitividad económica en la nueva gestión eléctrica y la diversificación con renovables

Al participar en la Convención Nacional de Industriales 2014, organizada por la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), el titular de la Secretaría de Energía (Sener) dijo que la reforma eléctrica ha sido poco difundida, porque la mayor atención pública ha estado sobre el sector de hidrocarburos.

Si bien es cierto que la mayor parte de la reforma energética en México ha estado muy dirigida a la situación de los combustibles fósiles, y al Pemex, desde las autoridades se ha destacado mucho la importancia para el futuro energético de México cumplir con las metas en energías renovables, impulsar la generación distribuida con energía como la solar fotovoltaica en hogares y comercios y atraer inversores privados para nuevos proyectos energéticos.

Dentro de la reforma energética actual, se establece que el Estado procurará la protección del medioambiente a través de criterios de sustentabilidad, el fomento de energías y combustibles más limpios, así como de medidas para propiciar la reducción de emisiones contaminantes en la industria energética. La reforma energética pretende eliminar los obstáculos jurídicos para nuevos proyectos y construir más líneas de transmisión. Respecto a la parte económica se dará un mayor acceso a créditos verdes preferenciales.

Por otro lado, durante la convención Nacional de Industriales, el titular de la Sener señaló que ahora podrá haber generación de electricidad pública y privada y también libre comercialización, se va a fomentar la creación de un mercado eléctrico. El sector privado podrá participar en actividades de transmisión y distribución de la electricidad mediante un esquema de contratos con la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Respecto a la generación distribuida con energías renovables, en México ya existe una amplia experiencia en la instalación de estos sistemas. El marco jurídico mexicano permite el Net Metering, como una de las soluciones más viables para mejorar la eficiencia energética y a la vez la protección del medioambiente y la calidad del aire. Los proyectos renovables a pequeña escala, impulsan la competitividad económica de las empresas y comercio, al permitir un ahorro considerable en la factura de la luz. Por otro lado, la integración de la energía limpia en la ciudad, reduce en gran medida las emisiones contaminantes. La ciudad de México DF, es una de las urbes más contaminadas del planeta, por lo que el estado está interesado en promover este modelo de generación para mejorar la calidad de vida de los habitantes.

Por tanto el cambio a un modelo energético más sostenible, el impulso de las energías renovables y la apertura del mercado eléctrico son puntos clave a tener en cuenta en la reforma energética para aumentar la competitividad económica.