El mercado eléctrico español necesita una reforma en profundidad.

D. Jorge Fabra Utray, exconsejero de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) y fundador de “Economistas Frente a la Crisis, en las jornadas celebras recientemente por ANPIER  llamadas “Hacía un nuevo modelo energético en España” explicó por qué es necesario una reforma en profundidad del mercado eléctrico basado en energías renovables.

En relación con lo comentado en la noticia “La ambigüedad del sector eléctrico”, D. Jorge Fabra denunció que, “el resultado de ello es la inseguridad jurídica y la confianza legitima, lo cual son unos elemento de enorme trascendencia para la economía de un país, que es lo que estamos viendo ahora. ¿Por qué estamos pagando ahora las primas de riesgo por encima de los 400 puntos y las hemos llegado a pagar por encima de los 600 puntos básicos? Pues simplemente por la inseguridad jurídica, por la falta de confianza en las normas y por el tipo de interés de la prima de riesgo, que en este caso es la variable que iguala y la que se interpone entre la percepción de la incertidumbre, es decir, entre el riesgo y la rentabilidad. A mayor incertidumbre, mayor riesgo, mayor prima de riesgo, y mayor coste financiero, porque naturalmente quien asume riesgos tiene que tener la cobertura correspondiente”.

El exconsejero de la CNE, explicó que “lo que estamos viendo en nuestro país en estos momentos, es que una parte importantísima de nuestro gasto se esta yendo a pagar los costes de la deuda. Una deuda que, desde el punto de vista de los fundamentales, está en una posición verdaderamente privilegiada en relación con: Japón, EEUU, Alemania, Francia,..en referencia a los ratios de deuda publica que  España tiene sobre el producto interior bruto (PIB) y que sin embargo, amenaza con ser insostenible porque los mercados creen que hay inseguridad jurídica en este país, y no debido a este país, sino debido a este país y su entorno. Por lo tanto, esto eleva los costes financieros que exigen los intereses por estar en este país, haciendo que nuestros ratios de deuda sobre PIB sean unos de los mejores de Europa, sin embargo se acercan hacia la insostenibilidad por su alto coste. Un coste que seria el mismo si tuviéramos el doble de deuda sobre el PIB  y la mitad de  costes financieros. Estos extremos de inseguridad jurídica, confianza legítima y pérdida de confianza legítima radican en que las normas un elemento grande e importantísimo para una economía. Pero cuando se produce una falta de seguridad jurídica o hay una perdida en la confianza en las normas de cualquier sector de actividad económica, hace que se extienda al resto de actividades económicas y se traduce en que el país tiene una elevada ineficiencia desde el punto de vista económico. Esta situación amenaza un futuro próximo de desarrollo de las energías renovables porque se percibe una enorme inseguridad regulatoria, lo cual exigirá a los inversores futuros altas primas de riesgo para compensar esa inseguridad”.

Por eso, en opinión de D. Jorge Fabra, “la situación del sector eléctrico es enormemente grave, y es enormemente grave porque es un sector que tiene una importancia extraordinaria,  es decir, la energía es el segundo input de costes en la actividad económica, porque el coste laboral y el peso de las empresas que producen, transportan y distribuyen la energía eléctrica son muy importantes. Y también la situación es muy preocupante porque, teniendo como tenemos el mayor coste de la energía eléctrica en España en relación con nuestro entorno internacional y europeo, hemos leído que solamente Malta y Chipre tienen un coste superior de la energía eléctrica a lo que tiene España, pero si imputamos a la energía eléctrica, el precio de la energía eléctrica a pagar, es decir, lo que ha aplazado el llamado déficit tarifario, que también es precio de la energía eléctrica de la misma forma que una hipoteca es precio de una casa, pues entonces podemos decir que tenemos un coste de la energía eléctrica superior al de Chipre y Malta también”.

Finalmente, el fundador de “Economistas Frente a la Crisis” cree que es necesaria una reforma en profundidad del sistema eléctrico por todas estas condiciones, porque no lo soporta la competitividad de la economía. Además, plantea que habría que preguntarse qué es lo qué está pasando para que tengamos el coste más alto, cuando seguramente tenemos uno de los esquemas, desde el punto de vista industrial y desde el punto de vista de la gestión del sistema, más eficientes del mundo; o también qué es lo qué pasa para que estemos en esta situación. Por  todo eso, hay que hacer una reforma del sector eléctrico y de la regulación retributiva, para que bajen los costes y hagan al sector eléctrico sostenible para los consumidores, tanto para las familias como para las empresas, así contribuir a la competitividad.

En esta línea señaló que "habrá que bajar los costes de la energía eléctrica y que la situación es muy preocupante, porque es posible que bajar los costes de la energía eléctrica sea enormemente complicado y peligroso para las empresas que actúan en el sector eléctrico porque la realidad económica que ellas viven en estos momentos es la realidad de la gestión contable que  han realizado estas empresas hasta hoy. Y no importa que hayan ganado mucho dinero, no importa que hayan tenido márgenes extraordinarios en sus actividades, lo importante es lo que figura en sus libros porque lo que figura en sus libros es lo que refleja la realidad económica de estas empresas. Si los fondos que han recibido no han ido a amortizar los costes fijos, por muy alto que sean los ingresos que han tenido, si sus libros e instalaciones están sin amortizar pues naturalmente tendrán que amortizarlas, y por lo tanto, tendrán que recibir ingresos suficientes para cubrir esos costes, lo digo simplemente como ejemplo...”