La eficiencia energética y el uso de la energía limpia, tanto en los edificios como en los procesos productivos es una de las acciones que más repercusión tienen para impulsar la competitividad de las pequeñas y medianas empresas, así como de generar ahorros importantes en las familias.
Además el ahorro energético se está configurando como un factor clave de la política energética de Panamá, así como la diversificación de la matriz energética con fuentes de generación limpia que no dependan tanto de los recursos hídricos. en épocas de sequía, el país se encuentra en una encrucijada para cubrir las necesidades energéticas de la demanda de 3,5 millones de habitantes, y de su sistema productivo, el cual además, está experimentando un fuerte desarrollo inmobiliario y de infraestructuras.
Por ello el gobierno de Panamá está muy interesado en fomentar la eficiencia energética en la construcción. En este marco, la Secretaría de Energía de Panamá, firmó un acuerdo con la Corporación Financiera Internacional para diseñar un nuevo marco regulatorio que fomentará la construcción eco eficiente y la reducción del consumo de energía y agua en las nuevas edificaciones. Este proyecto es parte de un programa regional de IFC que cuenta con el apoyo del Departamento de Relaciones Exteriores, Comercio y Desarrollo de Canadá.
Según un comunicado de la Secretaría de Energía, Panamá es uno de los primeros países de Latinoamérica en firmar este tipo de acuerdo que servirá para incentivar el uso de materiales y tecnologías más sostenibles y la definición de estándares de diseño y construcción eco eficientes. El objetivo principal es diseñar un código de construcción verde que tendrá vigencia sobre toda nueva construcción en Panamá a partir de que sea aprobada la regulación. Los primeros esfuerzos se enfocarán en viviendas y edificios de oficinas.
El proyecto busca implementar medidas inteligentes para el ahorro de energía con bajo impacto en los costos del mercado de la construcción en Panamá. Un mejor diseño de ventanales para disminuir la temperatura durante el día o el uso de agua lluvia para sanitarios son algunos ejemplos. Se espera un crecimiento del 15% en la nueva construcción en los próximos años, con lo cual el código pudiera tener un impacto importante.
El plan concentrará los esfuerzos del gobierno nacional a través del Ministerio de Economía y Finanzas y de la Secretaría de Energía. Será posible gracias a la alianza de IFC con el gobierno de Panamá y representantes del sector privado, incluyendo la Cámara de Comercio y el Panamá Green Building Council, que forma parte de una unión global de consejos para el mercado de la construcción verde.
El proyecto traerá sin duda beneficios a la población y al medio ambiente y podría situar a Panamá entre los países más innovadores de la región en cuanto a construcción sostenible. El acuerdo con IFC, el Banco Mundial, y el Ministerio de Economía y Finanzas puede ayudar al país a valorar y explotar sus capacidades y recursos, y orientarlo hacia dónde seguir en el camino de la eficiencia energética.
El IFC desarrolla este programa en otros países ayudando a crear códigos de construcción verde por ejemplo en Colombia, Indonesia, Bangladesh, Filipinas y Vietnam, entre otros
Amigos de la Tierra considera que volver al Acuerdo de París es lo fácil e insta a Estados Unidos a demostrar su compromiso con un plan ambicioso de reducción de emisiones.
La instalación de placas solares de autoconsumo sobre edificaciones existentes no requerirá acuerdo previo favorable en materia de servidumbres aeronáuticas a AESA. La eliminación de este requisito ahorra hasta tres meses de tiempo en tramitaciones.
Anuncios de huertos y cubiertas para instalaciones solares