Liberación y habilitación de la autogeneración de energía en Colombia

Para

i) Liberar de cualquier trámite a la autogeneración que sea utilizada exclusivamente para consumos propios.

ii) Habilitar la autogeneración y producción marginal para autoabastecer necesidades energéticas de manera remota e inyectar energía en diferentes sitios del Sistema Interconectado Nacional (SIN).

La normatividad previa restringía a los autogeneradores y a los productores marginales de abastecer su consumo de energía a través de fuentes de generación producida en los sitios distintos al de consumo. Lo anterior limitaba el aprovechamiento de las fuentes renovables que pueden ser desarrolladas en zonas favorables para la producción de energía y dificultaba la integración de estas FNCERs en el sector productivo.

Por ello, las modificaciones que entrarán a regir a partir de la expedición del Decreto 1406 del 22 de noviembre de 2024 se encaminan a establecer:

1. Que no se requerirá ningún tipo de autorización para la conexión al SIN o redes en las ZNI, ni tendrá distinción de gran o pequeña escala, ni límites de capacidad para cuando el autogenerador o el productor marginal no entregue energía a través de la red.
2. Que la energía eléctrica producida por los autogeneradores podrán utilizar los activos del STN y/o los sistemas de distribución para su propio consumo (autogeneración y producción marginal remota).
3. Que la CREG, dentro de los tres (3) meses contados a partir de la publicación de este decreto, elabore la reglamentación para la liquidación y participación de estos autogeneradores en los mecanismos del cargo por confiabilidad y la remuneración de servicios complementarios.

Estas modificaciones normativas abren las puertas para la nueva industria verde que diversificará la economía del país. Estas economías, intensivas en el uso de electricidad, podrán aprovechar los beneficios de la electricidad limpia producida en sitios diferentes a los de la manufactura industrial. Nuestro marco normativo armoniza la regulación con las necesidades del país y de un sector eléctrico sostenible que permita aprovechar los recursos renovables de los territorios y que promuevan un desarrollo productivo descentralizado y ecuánime dentro de la Transición Energética Justa.