La comunidad cuenta con 7.216 MW de potencia instalada procedente de fuentes limpias, un 18% más que el año anterior.
La apuesta decidida del Gobierno andaluz por la implantación de las energías renovables ha dado como resultado la culminación de la tramitación y la puesta en servicio de nuevos proyectos de generación eléctrica con fuentes limpias que han supuesto incorporar un total de 1.112 nuevos megavatios (MW) conectados a la red durante el año 2019. Se trata de 26 nuevas plantas renovables, que aportan 1.087 MW de potencia instalada, a los que se suman alrededor de 25 MW de nueva potencia fotovoltaica de menos de 10 MW.
De esta manera, Andalucía dispone, a fecha de enero de 2020, de una potencia eléctrica renovable instalada de 7.216 MW, lo que supone un crecimiento del 18% respecto a la existente el año anterior.
Estos son algunos de los datos que ha dado a conocer el consejero de Hacienda, Industria y Energía, Juan Bravo, durante la inauguración de la jornada Andalucía ante los retos de la transición energética organizada en Sevilla por la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) dentro del ciclo de eventos conmemorativos del 40º Aniversario de su constitución.
Los proyectos de tecnología solar fotovoltaica predominan con diferencia sobre los demás, con un total de 15 proyectos de más de 10 MW que suman una potencia instalada de 881 MW, el 80% del total. Este gran desarrollo fotovoltaico ha permitido que Andalucía duplique su potencia fotovoltaica conectada a la red, alcanzando los 1.799 MW contabilizados a 31 de diciembre de 2019, según los datos ofrecidos por la Agencia Andaluza de la Energía.
A gran distancia, se coloca la energía eólica, que incorpora 124 MW a través de seis proyectos, lo que representa el 11% del total. Esta tecnología se de-sarrolla en la comunidad autónoma desde los años 80 y con esta nueva aportación ya suma 3.448 MW distribuidos en 153 parques eólicos conectados a la red. Le sigue la puesta en servicio de una nueva planta de biomasa con una potencia de 46 MW que viene a consolidar la posición de liderazgo de Andalucía, puesto que la región encabeza el sector de la energía de la biomasa eléctrica en el ámbito nacional con 17 plantas que suman 274 MW.
La energía hidráulica, por su parte, añade a la contabilidad renovable andaluza una nueva planta con una potencia instalada de 34 MW, que hace que esta tecnología alcance los 650 MW con 93 centrales, según los datos que ofrece la Agencia Andaluza de la Energía y que pone a disposición de la ciudadanía a través de su web en el Mapa de infraestructuras energéticas de Andalucía - MIEA y de forma desagregada mediante su aplicación Infoenergía.
La mitad de esta nueva potencia renovable instalada en Andalucía durante 2019 es resultado de las subastas estatales celebradas para la promoción de renovables a principios de 2016 y en los meses de mayo y julio de 2017. En concreto, 18 proyectos que suman 576 MW. El resto se debe a iniciativas privadas del propio sector.
“Estas nuevas plantas renovables constituyen solo una parte del gran número de proyectos que se está tramitando en Andalucía y que permitirá en los próximos años un elevado nivel de inversión en la comunidad andaluza”, ha señalado Bravo en su intervención, en la que ha destacado que, “gracias a los altos niveles de irradiación solar, son rentables sin necesidad de tener que contar con un régimen retributivo específico que las incentive”.
Infraestructuras de transporte eléctrico
El consejero de Hacienda Industria y Energía también ha recordado la oportunidad que supone para Andalucía el actual proceso de Planificación de Infraestructuras Eléctricas de Transporte 2021-2026 que está ultimando el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, en el que la Junta ha presentado una propuesta basada en un pormenorizado estudio realizado por la Agencia Andaluza de la Energía en el que se identifica un potencial bruto renovable en la región que supera los 300.000 megavatios (MW).
La petición de Andalucía es liderar la transición energética aportando el 45% de la nueva potencia renovable que contempla el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, con 25.650 megavatios adicionales a los ya existentes. Una propuesta que ha sido contrastada y consensuada con los principales agentes implicados, desde las empresas transportistas y distribuidoras de electricidad, promotores, asociaciones y los departamentos de la propia Junta de Andalucía con competencias en este ámbito.
“Una propuesta realizada desde Andalucía y para Andalucía que integra todas las necesidades de infraestructuras que se requieren para la consecución de un modelo energético sostenible y basado en las energías renovables”, ha apuntado Bravo.
Incentivos a la eficiencia energética en la industria andaluza
Asimismo, el consejero de Hacienda, Industria y Energía ha hecho referencia a los beneficios del Paquete de medidas para la eficiencia energética de la industria en Andalucía, que gestiona la Agencia Andaluza de la Energía, a través del cual se financian actuaciones de eficiencia energética y aprovechamiento de calores residuales mediante la mejora de la tecnología en equipos y procesos industriales, la implantación de sistemas de gestión energética, y soluciones inteligentes para la evaluación y gestión de la energía.
Dotado con 100 millones de euros, engloba los incentivos del Programa para el desarrollo energético sostenible “Andalucía es más”, que incentiva a Pymes y autónomos entre un 25% y un 45% de la inversión (la cual debe ser al menos de 3.000 € IVA excluido para una ayuda máxima de 1 millón de euros); así como las ayudas a grandes empresas del sector industrial y pymes a través del Real Decreto 263/2019, que ofrece un 30% de incentivo (hasta un máximo de 15 millones de euros por solicitud y beneficiario, siempre que la inversión mínima incentivable sea de 25.000 euros, IVA excluido, y cumpla unos ratios mínimos de ahorro energético para las actuaciones incentivadas). Ambos programas son incompatibles entre sí y pueden solicitarse hasta el 31 de diciembre de 2020 o hasta el agotamiento de los fondos.
El documento publicado evalúa el impacto de la flexibilidad en el costo de descarbonizar la matriz eléctrica chilena.
Las Comunidades Energéticas están compuestas por Miichi Ka’i, tecnología innovadora creada por el IPSE que combina eficiencia, versatilidad y sostenibilidad para suministrar el servicio de energía 24/7.