En una de las zonas rurales más aisladas de Salta, Quebrada del Toro, donde no llega la red eléctrica, la energía solar mejora la calidad de vida de los jóvenes dotando de calefacción y cocinas a sus centros educativos.
Salta forma parte de la Región del Norte Grande Argentino, con más de 110000 habitantes de los cuales unos 200.000 aproximadamente según los censos correspondería a población rural. Salta es una de las zonas menos industrializadas de Argentina y aún arrastra ciertos problemas de subdesarrollo como las diferencias marcadas entre clases sociales y una economía cerrada, problemas que se agravan en las zonas rurales aisladas, donde ni siquiera llega el suministro eléctrico.
La Quebrada del Toro, dentro de la provincia de Salta, es una unidad que forma parte de una extensa red de cañones, entre los Andes del noroeste argentino, con un clima bastante riguroso. Aquí se encuentra ubicada la aldea del Alfarcito, donde han aprovechado el gran recurso solar de la región para mejorar algunas de sus condiciones de vida.
Alfarcito no contaba con apenas recursos, sin centros educativos, sin posibilidad de electricidad y casi sin medios para extraer agua, en definitiva un lugar donde no existía aporte de ninguna tecnología. Gracias al apoyo del Gobierno de la provincia de Salta y de instituciones como el Banco Interamericano de Desarrollo, esta aldea está dotada ahora con servicios de electricidad, calefacción, cocina, agua caliente o acceso a internet. Todo esto es posible gracias a la implantación de energía solar fotovoltaica, el fundador del centro escolar ha sabido aprovechar la fuente de un recurso tan abundante en la región para proveer de servicios a estas comunidades. El centro escolar de Alfarcito acoge a más de 100 escolares de secundaria, de otras aldeas, situadas en ocasiones a 10 horas a pie de la carretera más cercana. Los escolares además aprenden actividades como cocinar con energía solar, donde los niños pueden producir y comer comida caliente. Con los fondos del Banco de Desarrollo Interamericano se han instalado cocinas solares en otras 5 escuelas de la provincia.
Es muy difícil llegar a estos lugares con los servicios públicos y la alternativa del sol es mucho más viable. El objetivo es que la experiencia de el Alfarcito de expanda a otras aldeas. En otro lugar dentro de la provincia de Salta, en Campo Quijano, la escuela El Rosedal ofrece educación primaria en régimen de internado a niños con difícil acceso a la escolaridad, donde las instalaciones que necesitan energía utilizan la energía solar, como una emisora de radio donde los jóvenes pueden transmitir las noticias del día a su comunidad.
Las instalaciones ya han mejorado la calidad de más de 1000 niños en la región, y les ha dado la oportunidad de acceder a la educación. La energía solar como la principal fuente de abastecimiento eléctrico, ya no es una quimera para estas aldeas. Estos proyectos además cuentan con el total apoyo de estas comunidades, muy arraigadas a sus tierras y sus tradiciones y respetuosas con su medio ambiente, por ello ven con buenos ojos que la modernidad y el progreso les lleguen por medio de fuentes limpias y no contaminantes, las cuales no alteran su entorno.
En el marco de la edición número 36 de la jornada, por parte de relevantes actores públicos y privados han sido presentados los datos actualizados de la estructura energética en España.
El plazo para presentar alegaciones finalizará el lunes, 22 de abril de 2024.
