La energía fotovoltaica acumula ya de media un 36% de recortes.

Con la tasa que se impuso el pasado viernes en el Consejo de Ministros a la energía fotovoltaica y a el resto tecnologías del régimen especial y del  régimen comprendido dentro de la reforma energética, hace que la energía fotovoltaica no solo tenga este nuevo impuesto del 6%, sino que lleve acumulado desde el año 2010 un 36% el corte de su retribución.

Por este motivo, son muchos los integrantes del sector que se muestran contrarios a estas medidas puesto que creen que llevaran sus negocios o proyectos a la quiebra. Como se ha indicado antes, no solo es la medida que crea un nuevo impuesto del 6% a la venta de electricidad producido por este medio, sino que ya se acumula un 36% en sus recortes. Todo ello se suma a los efectos del Real Decreto 14/2010, por el cual se recortaron las horas con derecho a prima de dichas instalaciones durante tres años. Por este motivo, muchos promotores se quedarán sin retribución regulada desde el presente mes hasta final de año.

Desde UNEF, se advierte que esta reforma hace que muchos proyectos acaben en bancarrota, aunque quizás haya empresas que todavía puedan soportar algunos proyectos, la situación en general es de quiebra porque es muy difícil que los promotores sean capaces actualmente de mantener la rentabilidad de los proyectos.

Es por esto, por lo que los que constituyen el sector fotovoltaico no están de acuerdo ni satisfechos con el resultado de la reforma energética, a la que califican como una reforma fiscal que tiene un objetivo recaudatorio en vez de estimular la sostenibilidad del sistema eléctrico. Aunque por otra parte se sienten aliviados de que la cifra de esta tarifa finalmente sea del 6%, y no del 19% como se había estado augurando. De la misma forma, esperan que confiado en que esta normativa reduzca en buena medida el agujero del déficit de tarifa.

Además, como advierte Luis Torres vicepresidente de UNEF, “los promotores del sector fotovoltaico, en contra de los productores de electricidad en el régimen ordinario, no pueden repercutir las tasas sobre el usuario final porque cobran un precio fijo”. Al contrario, de lo que cree que harán las grandes eléctricas, las cuales repercutirán la mayor presión fiscal en el precio de venta de la energía, por lo que esta reforma la van pagarán los productores de renovables y los consumidores finales, aseguró Torres.

Por ello, desde UNEF se pide al Gobierno que pare temporalmente la moratoria que tiene puesta a  las instalaciones nuevas de energía fotovoltaica con prima, al igual que tampoco se demore con la aprobación de la nueva regulación que desarrolla el balance neto que es un aspecto clave para el autoconsumo de energía solar en hogares, empresas… y que estaba prevista para antes del verano.