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EE.UU. se compromete con ambiciosos objetivos alcanzables contra el cambio climático recortando emisiones fósiles y potenciando las energías renovables.
El plan de energía limpia establece estándares alcanzables para reducir las emisiones de dióxido de carbono en un 32 por ciento desde los niveles de 2005 para el año 2030.
Establecer estos objetivos concretos permite a los Estados crear planes a medida para satisfacerlos, dentro de un conjunto que actuará en varios frentes:
Protegiendo la salud de las familias estadounidenses, en 2030, se alcanzarán la prevención de:
-hasta 3.600 muertes prematuras.
-1.700 ataques cardíacos no fatales.
- 90.000 ataques de asma en los niños.
- 300.000 días de trabajo y escolares perdidos.
Un impulso para conseguir un 30% en generación de energía renovable en 2030, que:
-Creará decenas de miles de puestos de trabajo.
-Propiciará un descenso en los precios de coste de la energía renovable.
Y el consiguiente ahorro permitirá ahorros:
-De casi 85 U$D anuales para familias promedio americanas.
-Energía suficiente para alimentar a 30 millones de hogares en el año 2030.
-Para los consumidores $ 155 mil millones desde 2.020 hasta 2.030.
La temperatura media anual global ha aumentado en más de 1,5 grados entre 1880 y 2012 y la sensación del cambio climático al que asistimos es constatable con las mediciones científicas que se llevan a cabo. De esta forma 2014 fue el año más cálido registrado a nivel mundial, y 2015 está en camino de romper ese récord.
A nivel mundial, los 10 años más calientes registrados ocurrieron desde 1998; y para 48 estados USA, 7 de los 10 años más calientes registrados han ocurrido desde 1998.
El clima extremo supuso un costo en 2012 sobre la economía estadounidense superior a 100.000.000.000 U$D, con los siguientes capítulos gravosos:
- 30.000 millones U$D por sequías y olas de calor.
- 65.000 millones debido a supertormentas de arena.
- 11.100 millones causado por la combinación de tiempo severo.
- 1.000 millones por incendios forestales.
- 2.300 millones por el huracán Isaac.
El Clean Power Plan del Presidente fija su objetivo en la reducción de la contaminación de carbono de las centrales eléctricas, la mayor fuente importante de emisiones en los EE.UU., tal que representa aproximadamente un tercio de toda la contaminación de gases de efecto invernadero doméstico.
Ya en septiembre de 2013, la Agencia de Protección Ambiental (EPA) anunció propuestas estándares de contaminación de carbono para las nuevas plantas de energía .
Con este plan, por primera vez se establecen las normas de contaminación de carbono de las centrales eléctricas existentes, a fin de proteger la salud de nuestros hijos encaminando EE.UU. hacia una reducción del 32 por ciento en la contaminación de carbono para el año 2030 .
Los vehículos pesados (camiones comerciales, furgonetas y autobuses) son actualmente la segunda mayor fuente de contaminación por gases de efecto invernadero en el sector transporte.
En 2011, la Administración finalizó normas de economía de combustible para el modelo energético de los años 2014-2018 para camiones pesados, autobuses y furgonetas. Esto reducirá las emisiones de gases de efecto invernadero en cerca de 270 millones de toneladas métricas y ahorrar 530 millones de barriles de petróleo.
En la actualidad, la Administración ya ha establecido las normas más duras de economía de combustible para vehículos de pasajeros en la historia de Estados Unidos. Estas normas requieren un equivalente promedio de rendimiento de 54,5 millas por galón para el año 2025.
Desde que el Presidente asumió el cargo, el Departamento del Interior ha permitido proyectos para instalación a escala comercial de más de 50 eólicas, solares y geotérmicas en tierras públicas o tribales. Los proyectos podrían apoyar más de 20.000 puestos de trabajo y generar electricidad suficiente para abastecer 4,8 millones de hogares.
El presidente Obama también ha creado una nueva iniciativa para aumentar el acceso a la energía solar para hogares de bajos y moderados ingresos, y para construir una fuerza de trabajo más inclusiva.
Si bien el plan está encontrándose con la dura oposición republicana, que anuncia lluvia de pleitos -más que probablemente costeados por la industria fósil-, la actitud decidida unilateral estadounidense a buen seguro será modelo a seguir por las economías desarrolladas y supone un paso al frente, especialmente ante la proximidad del COP 21 en París y en sintonía con actitudes positivas como la de la Iglesia Católica de Francisco.
Fija meta de contar con más de quinientos millones de paneles instalados al final de su primer mandato y en diez años abastecer con renovables a todos los hogares.
El estudio elaborado por NOAA se basa en las contribuciones de 413 científicos de 58 países de todo el mundo, reflejando sus indicadores más importantes la continua tendencia ascendente del calentamiento global.
Subsidios para instalar 300 MW de renovables en viviendas, asistencia técnica, facilidades para préstamos inferiores a 25.000 U$D destinados a energía solar y eficiencia; con el compromiso y soporte de las autoridades a todos los niveles.
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